Pi, pi, pi, pi, pi
Otra vez ese pitido tan molesto... ¿Es que no puede apagarlo nadie?
Pi, pi, pi, pi, pi, pi, pi
Y dale, que no para. Ya no dejan a uno ni morirse en paz.
Pi, pi, pi, pi, pi, pi
Para, para, para, para, ¡PARA!
Mis ojos se abrieron de golpe, y de pronto esas odiosas paredes blancas que no decían nada. Blancas, impolutas, como si nadie se hubiese atrevido a ensuciarlas.
-¡Rulo!
Otro sonido, y mas estruendoso que el pitido. Que sitio más horrible.
-¡Rulo! - El grito se convirtió en un susurro y un cuerpo se abalanzó sobre el débil cuerpo que reposaba en la camilla tan blanca como las paredes, excepto por el bordado azul con el nombre del hospital que las cruzaba.
-¿Phoebe? - consiguió articular al que había llamado Rulo.
-Cariño, has despertado.
PD: Unos extraterrestres me han abducido y he pasado con ellos el mes de enero (aVenusnollegaelInternet) Me han inspirado un par de historias que estoy deseando contar, así que cuando tenga tiempo, inspiración y demás seguiré escribiendo. Paciencia, y agradeceros a los que seguís ahí eso mismo, que sigáis.
Me voy a la NASA, a contarles que están buscando vida en el planeta equivocado. Pero volveré. En breves. Espero.
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